entornos a la estación de kortrijk
La estación de ferrocaarril como parte integral de una plaza.
El Masterplan para la estación de Kortrijk quiere integrar en una única entidad el nuevo edificio y el espacio público de su entorno. No concibe la estación como un objeto en sí mismo sino como parte permeable de una plaza que va de fachada a fachada y que se refugia bajo su cubierta, un edificio que actúa como un puente sobre el ferrocarril.
A fin de contribuir a los objetivos del Masterplan, el diseño del espacio público ha de dar lugar a un conjunto unificado y reconocible que incorpore las diversas partes de que está compuesto así como la estación propiamente dicha.
Ello implica la necesidad de fluidez y continuidad en el espacio público. No ha de haber cortes, ni vallas ni obstrucciones. La finalidad es que no sólo la estación deje de ser un obstáculo en la continuidad de la ciudad sino también que la ciudad en sí misma se convierta en parte de la experiencia de los usuarios del tren.
Topografía.
Para conseguirlo, debe prestarse una atención particular a la topografía de la zona.
Especialmente importante es la topografía transversal entre la estación del ferrocarril y las fachadas de los edificios, dado que hay una diferencia de nivel significativa entre ambas, tanto en el lado norte de la estación como en el lado sud. Esto será todavía más grave por el hecho que los andenes de la nueva estación serán todavía más altos que los actuales.
Como consecuencia de ello, la topografía transversal del nuevo espacio público habrá de ser dividida en dos, de manera que los espacios destinados a uso peatonal no suban por encima de la pendiente de confort y que aquellos que necesariamente han de hacerlo sean destinados a otros usos.
Espacios duales en el lado norte de la estación.
En el lado norte de la estación, esto lleva a la creación de una limahoya lineal a cierta distancia de las fachadas de los edificios existentes. Los espacios entorno a este elemento lineal serán áreas confortables para los peatones mientras que el resto puede ser destinado a verde.
Esto dota de carácter dual a la esplanada la cual es, al mismo tiempo, un espacio activo que acoje actividades y una área verde que actúa de tampón entre el tren y la ciudad.
Conviene tener en cuenta que, en las zonas al norte de la estación, no se permitirá el tráfico privado y que la movilidad se reducirá al transporte público (autobuses), bicicletas y peatones. Hay que mencionar también que bajo algunas partes de esta zona se construirá un nuevo túnel viario y un aparcamiento subterráneo de dimensiones significativas.
Un espacio lineal en el lado sur.
En el lado sur, el espacio es más estrecho que el espacio disponible en el lado norte. Por tanto, para salvar la diferencia de nivel, será necesario un corte claro al lado de la estación del tren y disponer de arbustos como elemento de protección.
Es, además, parte de un pequeño anillo circulatorio que rodea el centro, cosa que implica que el tráfico seguirá siendo un elemento importante a lo largo de todo él. El nuevo espacio público tendrá carácter lineal y diferenciará claramente entre el espacio destinado a los coches y autobuses y el espacio destinado a bicicletas y peatones.
Algunas herramientas.
Topografia, pavimento, mobiliario urbano, vegetación y detalles para los puntos singulares constitueyen, en este punto del proyecto, las herramientas clave para definir su caràcter.
Se han definido los criterios para cada uno de ellos: pendientes máxima y mínima permitidas, uso de piedra arenisca protuguesa, un conjunto de elementos urbanos de acero, corten, madera o piedra, el inventario de especies arbóreas y arbustivas a utlizar teniendo en cuenta que mucha de esta vegetación estará sobre una losa de hormigón, su evolución a lo largo de las estaciones, el color de sus hojas y troncos,...
Utilizarlas de manera coherente permite hacer frente a las diferencias entre los diversos subespacios manteniendo una visión de conjunto única.
Zandstraat.
Zandstraat actúa como área de transición entre el espacio a lo largo de la estación y Kortrijk-Weide, donde la ciudad encuentra el río.
Es a lo largo de Zandstraat donde se produce el intercambio principal de flujos de peatones y ciclistas y donde éstos y salen de los túneles bajo el ferrocarril. La calle es también el camino que siguen los autobuses desde Magdalenastraat hacia la estación.
Su situación entre la estación y diversos equipamientos educativos, y la orientación al oeste de parte de sus fachadas, definen su potencial como zona de restauración que puede transformar radicalmente lo que hoy sólo es una zona de paso.
Su configuración está apoyada por las geometrias angulares de grandes zonas verdes que acompanñan los diversos tipos de tráfico (autobuses y bicicletas). Esto crea amplias aceras que promueven el uso peatonal. En el lado este, estas aceras pueden dar lugar a nuevas terrazas relacionadas con los negocios de restauración que pueden sacar partido de su exposición al sol.
Las superficies verdes combinan las diversas especies seleccionadas y se benefician de su diferencia en altura para articular el espacio. Los arbustos de hoja perenne ayudan a orientar las vistas y movimientos y se utilizan como referencia para los usuarios.
La esplanada.
Es una zona amplia donde los diversos flujos (autobuses, peatones y bicicletas) discurren paralelos entre sí y donde los elementos verdes y las salidas del aparcamiento subterráneo se utilizan para organizarlos.
La circulación del autobús y sus paradas se sitúan justo al lado de la estación, mientras que los peatones y las bicicletas se sitúan al lado de las fachadas de los edificios. Entre ellos, una amplia banda verde actúa como filtro y redefine la imagen del espacio público entorno a la estación.
La vegetación constituye aquí un elemento tampón fundamental entre la ciudad y el ferrocarril. La cubierta del aparcamiento subterráneo ha sido definida de manera que permita alojar al menos 1,50 m de tierra sobre la que plantar.
Stationplein.
Stationsplein ha de volver a ser un espacio representativo, tal como corresponde a su posición en la ciudad y sugiere la geometría regular de sus fachadas. Su uso actual como espacio de aparcamiento no sólo la trivializa sino que llega a negar su existència.
Ha de ser un espacio donde la gente pueda estar y pueda caminar, pero, incluso por encima de ello, ha de convertirse en un espacio que defina la imagen de Kortrijk a los viajeros y articule la relación entre la estación y la ciudad.
Si la introducción de vegetación es crítica en el diseño de los nuevos espacios entorno de la estación, se convierte en esencial en el área de la Stationsplein, donde ya hay cuatro especímenes bien desarrollados de Platanus.
Conjuntamente con ello, la alineación que define Burgemeester Reynaertstraat y a la cual el nuevo acceso de la estación responde, es el otro elemento clave en su composición.
Tacklaan.
Tacklaan es, por definición, una calle de carácter lineal, donde no es posible conseguir amplias zonas peatonales como en el lado norte de la estación. El esfuerzo para definir el nuevo espacio público debe, por tanto, concentrase en organizar los diversos flujos que tendrán lugar a lo largo de ella a fin de que las bandas paralelas que los canalicen funcionen correctamente y eviten las interferencias.
Una banda estrecha y verde -de un metro de ancho en su mayor parte- transcurre paralela al primero de los andenes acompañando el itinerario regional de bicicletas y creando una fisura entre ellos. Esta banda verde contribuye a solventar las diferencias de nivel significativas que existen entre la estación y los edificios. El espacio que queda es para los peatones con una alineación de árboles en el lado norte.